‘Napoleón’, la reinterpretación del director Ridley Scott (85) y el guionista David Scarpa (‘Todo el dinero del mundo’) sobre el líder militar francés, llega a los cines españoles este viernes 24 de noviembre tres años después de que se anunciara el proyecto protagonizado por Joaquin Phoenix (49) y producido por Apple (200 millones de dólares costó), que también ha estrenado este año el último largometraje de otro de los grandes directores de la historia, ‘Los asesinos de la luna’, de Martin Scorsese (otros 200 millones de dólares).
En 2024 será el turno de otro de los grandes, Francis Ford Coppola, para regresar con ‘Megalópolis’; también, probablemente, para la versión de 4 horas de ‘Napoleón‘ que Ridley Scott ha anunciado para la plataforma Apple TV+. Dos horas y media dura la versión comercial que llega este viernes 24 a los cines en un ‘esfuerzo’ del director, pionero en estrenar varios montajes de la misma película desde ‘Blade Runner’, por no aburrir al personal en las butacas.
‘Napoleón’ –uno de los grandes proyectos frustrados de Stanley Kubrick– no llega a los cines exenta de polémicas. El propio Ridley Scott respondió hace poco a un historiador crítico con las inexactitudes de su película número 28, protagonizada por Joaquin Phoenix y Vanessa Kirby (‘The Crown’) como Napoleón Bonaparte y su esposa Josefina (nombre, por cierto, del perro del director). «Buscaos una vida» fue la primera y elegante respuesta del director; la segunda contestación contenía palabras malsonantes y mandaba callar a los más críticos.
No ha sido la primera vez de Ridley Scott y Joaquin Phoenix compartiendo rodaje; hace 23 años estrenaron ‘Gladiator’. Para esta vez, el cineasta británico tuvo que rehacer el guión de ‘Napoleón‘ ante la «poderosa» actuación de Joaquin Phoenix, cuya primera nominación al Oscar le llegó precisamente por ‘Gladiator’, como el emperador Cómodo, y terminó ganando en 2020 por ‘Joker‘, otro tipo de reinterpretación (esta vez de un mítico personaje de cómic). Para hacer de Napoleón Bonaparte, al cineasta le bastó con poner un sombrero al actor: tenía la nariz y los ojos del militar francés. Phoenix era uno de los dos únicos intérpretes que el director tenía en mente.
El ‘decoro’ del director de ‘Napoleón’ con su estrella protagonista no quiere decir que el rodaje de apenas tres meses, inclusive la Batalla de Austerlitz, fueran 62 días de vino y rosas… Porque si hay algo que ‘detesta’ Joaquin Phoenix es ensayar (en ‘Joker’ improvisó más de una y más de dos escenas), lo que enfadaba diariamente a Ridley Scott, precisamente muy fan de la actuación del estadounidense como la némesis de Batman.
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